Aunque a algunos nos cueste asumirlo, ha llegado el invierno: esa estación del año en la que hay que tener especial cuidado de la piel para mantenerla en perfectas condiciones durante toda la temporada.
En estos meses, es muy frecuente que independientemente del tipo de piel, el frío y el viento resequen y castiguen la piel en mayor o menor grado, y que en algunos casos se pueda incluso producir una deshidratación tan profunda que se refleje en descamación.
La epidermis en general se torna más sensible y hay que proporcionarle cuidados especiales, especialmente con tratamientos orientados a evitar la tirantez, las irritaciones y la sequedad.
Lo más importante es prevenir y tratar nuestra piel diariamente para que todos estos efectos tengan el menor impacto posible.
¿Quieres conocer 7 consejos para una piel impecable y radiante en este tiempo de frío?
¡Sigue leyendo!
1 Limpia en profundidad tu rostro
Podríamos decir que es el paso más importante para mantener una piel perfecta en invierno ya que necesita estar limpia y bien oxigenada para poder regenerarse correctamente.
Si limpias tu rostro en profundidad con nuestra agua micelar monofásica, conseguirás eliminar en un solo gesto las impurezas y restos de maquillaje gracias a sus micelas naturales. Además, notarás una sensación súper refrescante y tu piel mucho más revitalizada gracias a su composición a base de khale, espinacas, té verde y cocktail de vitaminas (E, C, B3…).
2 Exfolia la piel
Exfoliar la piel es imprescindible para retirar la piel muerta, activar la circulación y facilitarle la oxigenación y regeneración celular.
En cuanto comiences a hacerlo de manera regular, notarás la diferencia. Tu piel estará más suave y lisa y además notarás como las propiedades de los productos y cremas que uses posteriormente, en tu rutina diaria, penetrarán mucho mejor.
Te recomendamos exfoliar tu rostro una vez a la semana con nuestro exfoliante limpiador enzimático para lograr una piel radiante, fresca y luminosa. Su ingrediente principal es el extracto de albaricoque que proporciona acción hidratante, antioxidante y renovadora celular. Combinado con partículas de la cáscara del albaricoque y de roca volcánica consigue una perfecta acción exfoliante física. Además, en su composición también se encuentran extractos de la flor de chumbera, que proporcionan luminosidad, y extractos de algas marinas de la isla de jeju, que minimiza el tamaño de los poros.
3 Hidrátate por fuera
Puesto que la piel se reseca y pierde más agua en invierno, debes cuidar la piel a nivel externo con una buena crema, ya que esta actúa como un escudo ante las agresiones externas.
Utiliza una crema hidratante cada día por las mañanas, antes de tu maquillaje, si es que te maquillas, y con una crema de tratamiento o más nutritiva de noche para aplicar antes de dormir, momento en el que la piel se regenera.
Con nuestra crema gel hidratante con efecto glow y antiedad conseguirás una piel tersa, elástica y firme. Gracias al extracto de arándano (acción renovadora celular), uva (acción antioxidante) y mora, (acción antiedad) retrasa el envejecimiento de la piel y la aparición de las primeras arrugas. La Betaína y los Ésteres de jojoba aportan hidratación, sin dejar la piel grasa gracias a su textura en gel que se absorbe rápidamente.
Para el contorno de ojos debes aplicar un producto específico, ya que esta zona es más sensible y en general sequita, y con el frío aún se acentúan más estos aspectos, provocando el envejecimiento prematuro, arrugas y sequedad.
Te recomendamos utilizar nuestro contorno de ojos iluminador antiedad, antiojeras y antifatiga. Su combinación de activos hace que hidrate intensamente, refresque la mirada y reduzca las arrugas y líneas de expresión. Además, gracias a su efecto glow conseguirás una mirada más luminosa y descansada. En su composición se encuentran extractos de frutas como la mora (por su acción antiarrugas) y la granada (por su acción antioxidante). También contiene extracto de rosa, combinación de péptidos y pigmentos iluminadores.
4. Hidrátate por dentro:
A pesar de utilizar los productos que van a aportar a tu piel la hidratación que necesita, te aconsejamos que también hidrates tu cuerpo por dentro. Para ello te recomendamos beber 2 litros de agua al día y seguir una dieta equilibrada que sea rica en frutas y verduras. Gracias a las propiedades de estos alimentos conseguirás antioxidantes, vitaminas y una dosis extra de agua.
5. Utiliza factor de protección solar también en invierno
A veces nos olvidamos de que la exposición solar no solo es dañina en verano. Aunque haga frío, incluso aunque esté nublado, los rayos UV siguen actuando por lo que hay que proteger la piel también en invierno.
Por ello es importante que cada día cuides tu piel de las exposiciones, ya que aunque no lo notes o no parezca grave, los ratos expuestos al sol, están dañando la piel si no la protegemos bien. A largo plazo se puede producir un envejecimiento prematuro y en ocasiones pueden aparecer incluso problemas cutáneos.
6. Protege e hidratar también la piel no expuesta
Aunque en invierno vayamos tapados y la piel de nuestro cuerpo no esté expuesta, también tiene necesidades que deben cubrirse.
Por los cambios de temperatura de interior a exterior, las duchas de agua caliente y que en general sudamos menos, los niveles de agua no se regulan igual así que no debemos saltarnos nunca la hidratación externa de nuestro cuerpo.
Para ello puedes utilizar nuestro aceite en crema porque es una solución rica y nutritiva que te proporcionará suavidad inmediata y mantendrá tu piel hidratada 24h. Contiene aceite de aguacate, manteca de karité, glicerina y buriti oil, con una textura transformadora que al ser masajeada en la piel se convierte en aceite.
También puedes utilizar una de nuestras mantecas corporales, son ligeras y su textura cremosa te encantará, especialmente si tienes la piel seca. Puedes escoger entre la de frutos rojos, mango o coco para conseguir una piel sedosa y reequilibrar su elasticidad.
7. Utiliza los cosméticos adecuados
Apuesta por productos con ingredientes que respeten tu piel y sean suaves con ella. También debes intentar que contengan los ingredientes adecuados, especialmente pensados para proteger tu piel del frío, como la vitamina C, la betaína y el resorcinol.
Y… lo más importante: se constante. Para conseguir tus objetivos y mantener una piel perfecta durante el invierno, lo más importante e imprescindible es sobre todo la perseverancia en estos cuidados diarios.
