Un año más le decimos adiós al calor y recibimos con los brazos abiertos al fresquito, a las tardes de netflix&chill y a los domingos caseros.
Pero con el cambio de estación llega el cambio del clima y el otoño es la estación perfecta para ayudar a tu piel a renovarse tras el verano y a prepararse para el frío. Además, durante estos meses la piel debe adaptarse al cambio anímico que experimentamos por la vuelta a la rutina, porque sí, ella también sufre depresión post vacacional y echa en falta esas horas extra de sueño que nos permitimos durante las vacaciones.
Así que si esta temporada quieres cuidarla como se merece para que luzca radiante y sana, deberás hacer algunos cambios en tu rutina. Toma nota de nuestras recomendaciones y ¡comienza a ponerlas en práctica hoy mismo!
Asegúrate de que tus duchas sean cortas y sin exceso de jabón.
A pesar de que somos fans de las duchas calentitas y relajantes, perjudican nuestra piel porque con el calor pierde su capa protectora y se deshidrata. Dúchate con agua templada, usa la cantidad de jabón indispensable y al terminar, aplica crema hidratante. Para ello puedes utilizar nuestras mantecas corporales (¡que huelen de muerte!) o nuestro aceite en crema. Ambos reparan la piel, la dejan suave y la mantienen hidratada durante 48h.
Exfolia la piel con regularidad
Es necesario que sigas una rutina de exfoliación al menos una vez por semana para acabar con las células muertas que se acumulan a causa de los agentes externos como el clima. Asegúrate de hacerlo con un exfoliante suave para no irritar tu piel y que contenga ingredientes nutritivos. Nuestros exfoliantes corporales combinan partículas de grano pequeño con grano medio para exfoliar de manera suave y eficaz. Están indicados para todo tipo de pieles y puedes escoger entre frutos rojos, papaya y mango o coco. Para exfoliar el rostro, puedes optar por nuestro exfoliante limpiador enzimático que realiza una doble exfoliación (física y enzimática) a la vez que alisa y minimiza los poros de la piel.
Bebe mucha agua y cuida tu dieta
Además del cuidado externo, es imprescindible que bebas mucha agua para que tu piel se mantenga hidratada. Para que te resulte más ameno puedes combinar los vasos de agua con infusiones como el té verde o la manzanilla. Y, aunque cueste, evita el consumo de cafeína porque puede tener un efecto deshidratante. Por supuesto, todo esto debe ir acompañado de una alimentación sana que te ayude a mantener la energía durante toda la temporada.
Adapta los productos de tu rutina de Skincare
Durante el otoño la piel ya no suda tanto como en verano, por lo que tiene unas necesidades distintas. Para limpiarla te recomendamos utilizar nuestra agua micelar monofásica, ya que no solo acabará con el maquillaje y las impurezas, sino que también le dará a tu piel el cocktail de vitaminas que necesita para revitalizarla e hidratarla. Además, aprovechando que en esta época la piel está menos grasa, es el momento perfecto para utilizar sérums que te ayuden a conservar la luminosidad y le den a tu rostro un efecto radiante. Puedes probar nuestro sérum revitalizante concentrado con acción antienvejecimiento que, además de despertar el brillo natural de la piel, combate su aspecto apagado, los signos de la edad y le aporta suavidad y firmeza. No te olvides de incluir también en tu rutina el contorno de ojos iluminador antiedad y la crema gel facial para mantener tu piel bien hidratada.
Protégete contra el viento, el frío y los rayos UV
Estos factores provocan que nuestra piel se seque más de lo normal y por eso es importante que sigas utilizando proyección solar también en otoño y que vistas con prendas de ropa que te protejan de ellos.
Ahora que ya sabes cómo debes cuidar tu piel durante el otoño, te invitamos a que también pienses en qué nuevos hábitos te gustaría incluir en tu rutina o cuáles quieres retomar. Practicar deporte dos o tres veces por semana, leer cada noche 30 minutos antes de dormir, comenzar un diario de journaling o dedicar cada mañana un ratito a la meditación, son algunos de nuestros favoritos y le harán mucho bien a tu mente y a tu cuerpo. ¡Qué comience el otoño!
